Valdes es un dúo fraternal cordobés perteneciente al colectivo Discos Del Bosque. El par fusiona lo mejor del house y el pop en un formato sumamente bailable y enérgico, que, tras el primer año del lanzamiento de su disco homónimo, no para de romperla.
¿De dónde surge la idea de entremezclar géneros como el house y el pop?
Francisco Valdes: En principio el proyecto no tenía un rumbo concreto, entonces empezamos a probar con canciones en inglés. Después nos dimos cuenta que nuestro idioma en la música es el castellano y que lo mejor era cantar en una lengua que todos entiendan. La idea era aportar algo a la escena cordobesa, y justamente a través de un género que no se ve mucho en las bandas de acá, como es lo electrónico, más que nada la canción electrónica. También esto tiene mucho que ver con nuestra juventud por el hecho de habernos curtido en boliches. Es un género con el que estamos muy familiarizados.
Eduardo Valdes: Yo pienso todo al revés de lo que dice él (risas). No, me parece que es justamente eso, ambos tuvimos experiencias muy parecidas, por ejemplo, en algunos shows los djs pinchaban y yo improvisaba con la guitarra y eso también me hizo empezar a componer música electrónica. De hecho, cuando tenía trece o catorce años, con lo primero que empecé a hacer música fue con loops. Por ende, el disco tiene esa impronta de vestido electrónico que termina de cerrar un círculo.
¿Cómo es esto de encarar un proyecto entre hermanos? ¿Cuáles son sus pro y sus contra?
P.V: El pro es que nos podemos decir todo en la cara (risas) porque nos conocemos desde que nacimos, entonces nadie se guarda nada. Y la contra es que al ser hermanos, y siendo los únicos dos de la familia, somos muy diferentes, muy opuestos el uno con el otro, entonces chocamos algunas veces. Pero bueno, es el aprendizaje de laburar con un hermano, aprender a ceder, aprender a bancarnos mutuamente, más allá de las peleas.
E.V: Claro, por ahí es difícil separar las cuestiones personales de las profesionales desde ese punto de vista. Cualquier pelea entre nosotros puede repercutir en algunos aspectos musicales, a veces sí, a veces no, pero creo que más que verlo como pros y contras. Es una cuestión global, un desafío, tratar de encontrar un equilibrio, o encontrar mecanismos que te ayuden a no reaccionar mal o a tomar distancia antes de decir algo.
¿Lejos de los Gallagher ustedes?
E.V: Muy lejos de eso, los tipos se pelean constantemente y son unos narcisos los dos -comenta entre risas-.
P.V: Esperamos nunca llegar a eso.
Tienen un disco debút con casi 60 mil visitas en Youtube que apenas lleva poco más de un año ¿consideran que superó las expectativas personales?
PV: ¡Ah la mierda! ¿tantas? Son un montón. Nosotros al disco cuando lo empezamos a hacer, yo iba a la casa del Edu, grabábamos voces y cuando menos nos dimos cuenta, teníamos once canciones. De repente dijimos: “bueno che, pongamos nombre a la banda y armemos un álbum”. Los chicos de Discos Del Bosque nos ofrecieron ser parte del sello y de repente empezamos a tocar. Fue todo un desafío también llevar el disco al vivo. Después salieron oportunidades en Niceto, La Trastienda, lugares de Buenos Aires muy copados, mucha gente a la que le gusta nuestra música y eso es clave. Muchos amigos también que se copan y nos van a ver como Jvlian, Bandalos Chinos, Juan Ingaramo, Fran Saglietti así que si, para mí superó totalmente las expectativas.
E.V: Lo flashamos bastante, por ahí te das cuenta cuando ya pasó todo. Por ejemplo, el año pasado fue como muy intenso y era un poco caótico salir para Buenos Aires, volver, y a los tres días salir de nuevo, entonces a toda esta cuestión de cómo superó nuestras expectativas lo podemos visibilizar recién ahora.
¿Cómo es el proceso de composición? ¿Trabajan juntos o por separado?
P.V: En el primer disco, Edu era más productor y actualmente lo sigue siendo en las cuestiones musicales, pero más que nada componemos juntos. Edu trae una idea musical, yo le aporto melodía y letra, después entre los dos vamos viendo ambos aspectos como así también la estructura de las canciones. La mayor parte del trabajo la hacemos juntos, pero cada uno por su cuenta hace sus cosas. Él en su casa hace más que yo, claramente. Yo soy más un compositor social, tengo que estar con algún aliado para ir tirando melodías. El otro día vi un video en Youtube que decía que para armar una canción con esa alma de fiesta es mejor estar en grupo para agitarse mutuamente (risas).
EV: En el primer disco había un método de composición como un poco más ordenado. Yo armaba las bases, toda la parte de producción y Pancho caía a casa y armábamos la melodía y la letra. En este segundo disco se abrieron las puertas para que él comience a participar en la parte de preproducción, sobre todo en la estructura. También cambiamos un poco la forma de laburar, porque ahora armamos un pattern de batería y sobre eso hacemos cuatro temas, y de esos cuatro temas elegimos el que más nos cierra.
¿Cuál es la canción que más les gusta interpretar en vivo?
P.V: A mi Unicos en el mundo.
E.V: Si a mí también, entre esa, Bailar sola y Bienvenida a mí.
E.V: Lo que nos va pasando a nosotros, es que a medida que vamos tocando los temas, vamos encontrando un montón de cosas, siempre estamos pensando en que le podemos aportar, y es muy loco porque cuando vos sentís que le encontraste algo que te gusta, después eso se traduce en el vivo. Cuando subíamos a tocar, abríamos con Nada mas, y a veces lo usábamos como primer tema a modo de intro, digamos que no se terminaba de cerrar, pero ahora siempre lo tocamos como bis y va como piña.
P.V: Después de que vimos un documental de Justice, que están como delirados rompiendo todo, le pusimos como una energía extra (risas).
Si alguien que nunca vió a Valdes les pregunta cómo son sus shows ¿qué responderían?
P.V: Son shows muy bailables, shows pélvicos, eso está buen y ricos instrumentalmente.
E.V: Prefiero que esté más asociado a la danza que a otra cosa. Show pélvico sensual. Show bailable, pélvico, enérgico, artístico y conceptual, ese es el término (risas).
En sus últimos shows interpretaron temas nuevos ¿Están trabajando en un nuevo disco?
P.V: Sí señor, tenemos un disco nuevo que va a salir por Sony también (risas). Si, la semana que viene nos vamos a laburar a una casita de campo que tenemos en Parque Siquiman en la que veraneamos desde chicos.
E.V: Algo así como un retiro espiritual.
P.V: Lo estamos laburando, nos va a ayudar a producirlo Hernán Segret que es un musicazo y amigo de Buenos Aires, así como también vamos a invitar a muchos otros amigos. Tenemos ganas de meter un rap con feats de gente que colabore. Estamos enfocados en el segundo disco.
¿Hay fecha estimativa para este segundo material?
E.V: Lo tenemos pensado para el año que viene, a principios de marzo o abril, pero obvio que eso es un tiempo que estimamos nosotros. Tenemos algunos temas que ya están terminados y hay otros a los que les falta componer las partes. La idea es esa, que podamos sacar dos simples y con eso aguantar un tiempo como para seguir trabajando en lo otro, y el año que viene largar el disco completo.
Últimamente estuvieron tocando en Capital Federal ¿Qué opinan de la escena porteña? ¿Ven a Buenos Aires como una parada obligatoria?
E.V: Sí. Creemos que hay algunas cuestiones que se han descentralizado un poco en cuanto a escenas que se gestan en diferentes provincias. Claramente Buenos Aires tiene su escena, Córdoba la suya, así como la tienen Mendoza y Rosario también. Para nosotros es muy importante ir a tocar a Buenos Aires porque hay mucho público, muy buenos lugares y también porque en una noche quizás te bajas de tocar y te encontrás con algún músico que admirás, pegas onda y ahí viene la parte en la que yo me voy a dormir, Pancho se va de caravana y se hace amigo de todo el mundo. La noche de Buenos Aires está muy buena.
¿Qué encuentros se dieron en Buenos Aires, por ejemplo?
P.V: La última vez que fuimos como invitados en una fecha, Emmanuel Horvilleur estaba entre el público. Hablamos con él, le gustó la banda y se re copó con todo. Si bien tenemos un lugarcito en la escena, es cuestión de seguir tocando y tocando.
¿Qué planes tienen para lo que resta del año?
P.V: Tocar, componer…
E.V: Tratar de pelearnos menos (risas)
P.V: No, tocar, componer, llegar más lejos, viajar más.
E.V: Sí, sobre todo viajar más por Argentina me parece. Tenemos algunas puntas como para ir a tocar a Mendoza, San Juan, San Luis, pero por ahora tenemos que equilibrar un poco más la cuestión entre tocar y componer.
P.V: Claro, ese sería el plan: buscar el equilibrio entre toques, porque no queremos dejar los escenarios, y a la vez tener el tiempo para armar el disco. Por otro lado, tenemos pensado hacer un banda completa dos, tener una formación fija para Valdes y salir a tocar. En lo personal, yo estoy muy acostumbrado a eso, el formato tiene otra energía, interacción. Básicamente ese sería el plan.
E.V: Para la próxima fecha del 12 de agosto en Centro Cultural Córdoba vamos a tocar con banda completa. Seguramente arrancamos solos y de a poco van ir subiendo el resto de los invitados; y por supuesto que ustedes también lo están ¡Los esperamos!
Por: Octavio Suarez.