Una leyenda china cuenta que un hilo rojo invisible conecta a aquellos que están destinados a encontrarse, sin importar tiempo, lugar o circunstancias. El hilo se puede estirar o contraer, pero nunca romper. Manuel (Benjamín Vicuña) y Abril (Eugenia Suarez) parecen estar ligados por ese destino infalible. Luego de conocerse en un avión quedan flechados instantáneamente, sienten que son el uno para el otro. Pero el destino hace que se separen y no vuelvan a encontrarse hasta varios años después. Ahora el tiempo ha pasado y ambos han formado sus familias y están felizmente casados con Laura (Guillermina Valdés) y con Bruno (Hugo Silva). Pero el deseo, el amor y el destino los vuelve a atrapar en sus redes para que vivan otro encuentro inolvidable, poniendo en crisis sus valores y creencias sobre el amor y donde surgen preguntas de respuestas difíciles. ¿Se puede amar a más de una persona a la vez? ¿Estar destinado con alguien es siempre algo bueno? ¿Cuándo hay amor entre dos personas el final siempre es feliz?
“Para mí, no se puede amar a dos personas a la vez, soy bastante estricta” responde la china, a lo que Benjamín se opone “Se puede amar a dos personas a la vez, tu pareja, tu familia. Este es el llamado de atención de la película. Cada uno tiene una opinión sobre eso. Son las dudas, las fantasías, las cosas no resueltas que plantea El hilo rojo”.
“Conocía la leyenda y me conmueve. Va más allá del vínculo amoroso, también tiene que ver con la familia, los vínculos familiares. La esencia del proyecto es hablar del destino, de la fuerza del amor en todas sus formas, de la química, la magia de los personajes, de lo contemporáneo que es el conflicto entre estos” cuenta Vicuña “El cine tiene su particularidad, creo que imprime momentos. Esta película imprime la magia de Cartagena de Indias, la química de los actores y el trabajo de Daniela (Goggi)”.
Guillermina Valdez, define a la película como “irreversible” y revela que si bien Marcelo (Tinelli) aún no vió el film desde un primer momento la apoyó en el proyecto. “Es una historia que llega a todos y que cualquiera puede formar parte. La película es muy esperanzadora, atrapante y linda de contar”.
Daniela Goggi ya había convocado a la china para la grabación de Abzurdah, donde tuvo un papel protagónico. “Fui muy malcriada en Abzurdah, me mal acostumbraron. Y si no fuera por la dirección de Daniela no hubiera podido hacer nada de lo que hice. Me fascina entregarme a ella, es una experiencia ideal para aprender” dice la actriz mientras que Goggi afirmó que “es un placer repetir equipo y ver el crecimiento de todos, hay más rapidez y eficacia”.
“Morir, tener sexo, acabar, son las escenas más difíciles para el actor” -dice el chileno al ser consultado por las escenas eróticas que aparecen en la película- “se busca también encontrar una situación relativamente cuidada, de intimidad, de oscuridad”. En cuanto a la china, tampoco son escenas que disfruta hacer “Yo sé que de afuera deben decir que es mentira, pero no. Particularmente yo no las disfruto, pero suelen ser toma única o dos tomas y se hace más llevadero.”
Eugenia reversiona a Amy Whinehouse con You Know Im No Good, “Es parte de una escena y yo acepté hacer el cover” –dice- y ¡lo hace genial! pero sin embargo las críticas no tardan en llegar. “Estoy acostumbrada a las críticas, siempre que hago estas cosas estoy esperando la crítica. En este caso, lo hice con mucho respeto, sin intención de parecerme a ella” agrega.
“Estoy muy contento y comprometido” dice Benjamín en referencia a El Hilo Rojo. Sin embargo, el compromiso parece ir más allá de lo laboral. Durante la conferencia, Vicuña y la China lucieron un mismo anillo en sus dedos anulares, lo que lleva a interpretar que se habrían comprometido. “Dos personas que se encuentran a través del tiempo, el destino las junta y no pueden escaparse de eso. Yo creo particularmente en esa leyenda. Creo en El Hilo Rojo cada vez más”, afirmó ella.
Tras ser interrogado por el desborde mediático que se dio durante el rodaje del film y si cambiaría algo de lo acontecido Vicuña responde: “El destino no se puede modificar. No sé si está escrito o qué, las casualidades o las causalidades. Sí creo que la película se defiende por sí sola, que las anécdotas, el ruido y esas cosas se van a perder en el tiempo. Va a quedar una gran película que va a trascender”.
Por: Tomás Altina.